Parece que todo va bien

el día se ha levantado destemplado
algunos proyectos rotos, que-se-suplen con fotografías murales

coges un tren

todo parece normal,
poco a poco se van llenando los asientos con joyas engarzadas.

de repente un tipo dos sillones mas allá comienza a morder su mochila, el asa superior, desesperadamente,
casi de una forma sexual, las manos acompañan a los labios.

el tren sigue su curso

Las drogas y las joyas, el hiperrealismo y la psique, la memoria y los tiros a padres ajenos,
la luz sigue sonando entre las sombras.

una madre satinada por encima de la rodilla hasta la clavícula, y morena de uvas el resto,
irrumpe
su perfume ahoga a un vagón y parte del otro, no para de mirar a todos lados,
(en una ocasión hizo sonreír a su hijo)
su labio inferior se arrugaba en contra de la gravedad,

teniendo la nariz por meta

Un hombre sufre a su lado, cierra los ojos y los frota con el pulgar,
el resto de dedos.
una jornada larga, mochila al techo.

Hay otra mujer de nariz larga sentada casi enfrente de la joya,
tiene una nariz larga,
la frente estrecha, barbilla agradecida y cara forzosamente perdida
lleva una estrella de David al pecho, rojo y blanco viste, una bolsa y nada mas.

me bajo del tren St Josep,
me bajé una antes.

(Parece que todo va bien)